Y me he vuelto a echar para atrás. Lo tenía todo controlado. Lo había dicho y no me estaba arrepintiendo. Pero llegó el viernes. Somos una piña. Nos llevamos (aparentemente) bien todas con todas y no quería que pasase nada por mi culpa, y aunque tenga que hacer lo imposible porque no se note, lo haré. Y lo haré por las demás y por mí misma, no puedo ser así de egoísta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario